Modificación del acuerdo sobre puestos docentes de especial dificultad
- La propuesta atiende no a las características o la atención educativa que precisa el alumnado, sino a la tipología familiar
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La Consejería de Educación convocó la Mesa Sectorial con la voluntad de ampliar nuevos apartados del Acuerdo de Especial Dificultad, que fue firmado el 27 de junio de 2016, por ANPE y otras OOSS.
En la citada Mesa Sectorial de Educación de 15 de junio, ANPE propuso la ampliación de la consideración de Puestos de Especial Dificultad en los siguientes casos, teniendo en cuenta las características específicas del alumnado y atención educativa que se desarrolla en estos puestos docentes:
- Todos los puestos docentes que imparten docencia en las Aulas abiertas (aulas con alumnos NEE en C. Infantil y Primaria).
- Todos los puestos de Orientadores y Profesores Técnicos de Servicios a la Comunidad (PTSC) del Equipo Regional de Atención a alumnado NEE.
- Todos los puestos de Orientadores y PTSC con destino en los IES y CIFP, que atienden igualmente a alumnos NEE y NEAE de sus centros.
- Todos los puestos de Orientadores y PTSC que atienden iguales alumnos desde las Unidades de Orientación de los Colegios de Educación Infantil y Primaria.
- Todos los puestos de Orientación y PTSC que atienden, desde los EOEP, a los alumnos de NEE y NEAE de los colegios de sus zonas respectivas.
- Todas las aulas ordinarias en las que el 25% de alumnos son de NEAE.
- Todos los puestos docentes en aulas de la FP Básica.
Hay que destacar que el desempeño de estos puestos no genera derechos económicos, sino que únicamente se valoran como mérito para provisión de puestos de trabajo tanto en el Concurso General de Traslados como en las listas de interinos.
La propuesta presentada por la Consejería en la Mesa Sectorial de hoy, jueves 7 de julio de 2022, aborda planteamientos que, en opinión de ANPE, están fuera del marco jurídico que otorga el Acuerdo de 10 de agosto de 2016, del Consejo de Gobierno del Principado de Asturias.
Se propone modificar el acuerdo vigente ampliando los casos para entender la especial dificultad en la docencia, atendiendo no a las características o la atención educativa que precisa el alumnado, sino a la tipología de las familias, un exceso que supone estigmatizar a los alumnos en función de su procedencia familiar, olvidando al propio alumno y presuponiendo que son malos o peores alumnos que otros, porque disfrutan de una beca de libros, porque sus padres tienen estudios básicos, se encuentran circunstancialmente en el paro o no tienen profesión conocida por el centro educativo.
Para ANPE, las políticas compensadoras de estas circunstancias deben ser abordadas por el Principado desde otros ámbitos, no se pueden mezclar churras con merinas: plantearlas en un acuerdo de especial dificultad excede con mucho el marco regulador referido a las condiciones de trabajo del profesorado.