El Gobierno de Asturias menosprecia a sus docentes y no se molesta en ocultarlo.
Así se desprende de la decisión que ha tomado el Principado al excluir al profesorado de la carrera profesional en los Presupuestos de 2024, lo que supone una discriminación y una vulneración de sus derechos económicos y laborales.
Recordemos que, en 2019, el Gobierno asturiano incumplió su compromiso de incorporar a los docentes al nivel II del Plan de Evaluación, mientras que sí lo hacía con el resto de los empleados públicos. Esto provocó un conflicto con los sindicatos que firmamos el Acuerdo que sustenta el Plan y la Ley 6/2009, quienes tuvimos que recurrir a movilizaciones para lograr finalmente su desbloqueo en septiembre de 2021, tras 2 años y 8 meses de marginación y de pérdida de derechos económicos, que supusieron entre 1.800 y 2.800 euros menos al año, según la categoría profesional.
Ahora, la historia se repite: efectivamente, mientras que en los presupuestos del Principado para 2024 se consigna una partida presupuestaria para la carrera profesional del nivel III de la Administración General, el Gobierno asturiano ha vuelto a dejar fuera del nivel III del Plan de Evaluación docente al profesorado, nuestro modelo de carrera profesional. Esto no sólo supone incumplir el Acuerdo, sino que contradice una de las promesas electorales del PSOE, que se comprometió a desarrollar los cuatro niveles en la pasada legislatura, cosa que evitó hacer.
El Gobierno asturiano no sólo ignora las demandas de los profesionales docentes para mejorar la calidad de la enseñanza pública, como la reducción de ratios, la burocracia, la jornada lectiva de maestros y de mayores de 55 años, sino que además asesta al profesorado un golpe bajo, quizás porque considera al colectivo docente un sector dócil y entregado, que no ha sabido exigir el cumplimiento de lo pactado a quien promete sobre el papel e incumple sistemáticamente.
ANPE no lo acepta: este sindicato va a denunciar esta actuación y a poner todos los medios para revertirla.
