ANPE pide responsabilidad y cordura a las partes para poder avanzar en la negociación que ya se inició el pasado 17 de julio.
Para ANPE, las medidas anunciadas por la Consejera de Educación el pasado 30 de mayo y que ya se presentaron en la Mesa General de negociación celebrada el pasado 17 de julio suponen un gran avance para las condiciones laborales de todo el profesorado asturiano.
En primer lugar, las 23h lectivas para Maestros suponen una inversión de 23.5 millones de euros y la creación de 486 puestos de trabajo, es decir, un incremento del 8% en la plantilla de Maestros.
Por otro lado, las medidas referidas a la reducción de la burocracia, con una inversión de 3 millones de euros, se basan en la sustitución y actualización de aplicaciones informáticas y la simplificación de procedimientos que inciden directamente en la manera de trabajar del profesorado.
Cabe destacar que la convocatoria de huelga, de la que ANPE se desmarca, se produjo con posterioridad al anuncio de las medidas (24 horas después) y que se mantiene pese a que la negociación ya se inició el pasado 17 de julio en la Mesa de Negociación. ANPE considera esta situación inaudita e incomprensible dado que atenta contra toda lógica en los procesos de negociación.
En este momento, el comité de huelga demanda que la Consejería de Educación les convoque a una reunión con la pretensión de llevar a cabo una negociación que, en ningún caso, según la legislación vigente, es competencia de ese órgano.
La negociación debe continuar en la Mesa General de negociación, que ha celebrado su primera reunión, y cuyo desarrollo se está viendo entorpecido por la negativa continuada de desconvocar la huelga por parte de las Organizaciones Sindicales convocantes.
La consecución del acuerdo sobre las medidas ya presentadas no se puede supeditar la aceptación (o no) de otras reivindicaciones. Pero esto no quiere decir que se desista en la reivindicación de esas otras mejoras. ANPE, desde luego, no cesará en reivindicar otras mejoras para el profesorado.
ANPE pide responsabilidad y cordura al resto de organizaciones sindicales para poder conseguir lo que el cuerpo de Maestros y el profesorado en general está demandando, es decir, acordar estas medidas.
La demora en la consecución de este acuerdo significa retrasar todas las modificaciones normativas que serán necesarias para que las medidas sean de aplicación real en las aulas.