El Principado retira su propuesta de la Ley de Salud Escolar y reescribirá una nueva Ley incluyendo la expresión del tipo "la atención sanitaria será desarrollada por personal sanitario", para poner de manifiesto de una manera inequívoca que los docentes no tienen funciones sanitarias ni administran medicamentos.
Se evitaría así la inconcreción denunciada por ANPE, que dejaba abierta a la interpretación y posterior desarrollo reglamentario, de modo que los docentes estarían obligados a actuaciones específicas en materia de salud, referidas al alumnado, como literalmente rezaba el anteproyecto.
Parece que todo el mundo tiene claro que los docentes no son sanitarios y no tienen ni la formación ni la competencia profesional, pero el anteproyecto de Ley no lo decía expresamente y esa es una línea roja para ANPE: tiene que haber una manifestación expresa, una redacción inequívoca que aleje cualquier sombra de duda respecto a que los docentes no tienen funciones sanitarias ni administran medicamentos.
En segundo lugar, recalcamos la necesidad de dotación estructural de personal de enfermería, profesionales adscritos a los centros docentes, que se ocuparían de los alumnos con problemas de salud.
Finalmente, ANPE hizo hincapié en que la formación obligada del profesorado que la Ley contempla, debe de ser exclusivamente en horario laboral lectivo: lo contrario supondría una carga adicional de trabajo inaceptable.